Desde Andaluces de
Alcalá apoyamos las campañas de reforestación. Éstas son especialmente útiles
en espacios degradados e, igualmente, las consideramos necesarias en las zonas
verdes y ajardinadas, fuera de la especulación urbanística, y enmarcadas en
nuestro entorno urbano y rural.
Nuestra crítica, en este
sentido, tiene en consideración los aspectos positivos de las actuaciones
llevadas a cabo por el Ayuntamiento. Así, la adquisición en 2011[1] de
parte de la Hacienda Oromana, su integración en el Parque y la declaración del
conjunto como “Monumento Natural”, cumplen con dicha consideración[2].
No obstante, no es menos cierto que, tanto ésta, como otras intervenciones en
el tramo urbano del río, siempre vinieron precedidas de una fuerte movilización
social a instancias de la Plataforma Salvemos el Guadaíra, entidad a la que los
alcalareños le debemos las mejoras que hoy todos disfrutamos.
No obstante, a la hora
de valorar la actuación municipal en materia de arbolado, tanto en el río cómo
en el núcleo urbano, cabe recordar un largo rosario de costosos despropósitos,
muchos de ellos, por suerte, no consumados en su totalidad por la oportuna
intervención del grupo ecologista Alwadi.ira. Entre tales hechos criticables es
necesario citar actuaciones como el desmonte llevado a cabo en el Parque de
Oromana, financiado con el programa “Andalucía Joven”, que ocasionó la pérdida
masiva de sustrato vegetal; la plantación de magnolios junto al “Molino de
Oromana”, de los que no quedó ningún ejemplar de recuerdo; la eliminación de
los naranjos a lo largo de la ribera, actuación no ejecutada completamente por
la denuncia del grupo ecologista; el desbroce parcial de la “Huerta de la
Quemada”, denunciado por la Plataforma ante el Juzgado de Guardia; la
sustitución de las jacarandas de la Avenida de Bailén, para plantar otras
especies; la saturación de la Avenida de Santa Lucía con especies antagónicas,
etc. A esto queda añadir las podas inadecuadas y a destiempo que hacen
inseguros a los árboles al cabo de los años, la corta de raíces cuando se
ejecutan obras o los riegos inadecuados,
que vienen a constatar la ineptitud de los diferentes equipos de gobierno en
materia de arbolado, parques y jardines.
En este sentido, la
plantación llevada a cabo en la zona del “Puente del Dragón” puede incluirse en
este tipo de actuaciones sin sentido, asesoradas con criterios técnicos de
dudoso rigor y, al menos en este caso, de un marcado carácter electoralista. Desde
Andaluces de Alcalá consideramos que el lugar elegido, la zona del “Puente del
Dragón”, no necesita una plantación forestal, pues la zona ya cuenta con
suficiente arbolado. Sin embargo, otras partes del término municipal así lo
requieren, basta con citar un par de ejemplos: en la propia la ribera del
Guadaíra, en el tramo fluvial existente entre el “Puente de la Vega” y “Molino
Hundido”; o en zonas no ribereñas, como el “Puntal de Oromana”, finca de
titularidad municipal.
Además, cabe recordar
que en nuestro término municipal continuamos perdiendo núcleos arbolados sin
que el Ayuntamiento haya reaccionado. Basta citar casos como la olmeda del
arroyo de la madre de Gandul, que ha sido calcinada en su mayor parte, o en
conjunto la mayoría de olmedas que aún perviven están afectadas por grafiosis
sin que la Delegación Municipal de Medio Ambiente haya tomado medidas, quizás
ni siquiera sea consciente del problema. También se han visto afectados por
incendios importantes tramos de la “Cañada Real de Morón”, del “Cordel de
Gallegos”, del “Cordel de Pelay Correa” o del “arroyo del Novillero”, por citar
solo unos pocos casos. El Ayuntamiento no tiene un plan de reforestación, ni
políticas serias a tal efecto, y, lo que es peor, no conserva nuestro
patrimonio en materia forestal, y por
ejemplo no ha ejercido la compra de la “Dehesa Nueva”, posiblemente la mayor
superficie forestada del término municipal, donde en estos momentos además de
talarse los eucaliptales existentes, también se están llevando por delante el
sotobosque.
Resulta evidente que la
privatización del mantenimiento de los parques y jardines ha resultado
claramente inadecuada. Consecuentemente,
es urgente un análisis exhaustivo de la gestión y facilitar los datos claves a
la ciudadanía. Los acuerdos con empresas suministradoras de plantas y
mantenimiento deben ser revisados y cancelados. En este sentido, Andaluces de
Alcalá considera necesario la puesta en funcionamiento de un servicio municipal
de parques y jardines, así como la recuperación del vivero municipal. Todo esto debe estar enmarcado en un Plan Director
de Reforestación del Arbolado Urbano y Rural del municipio que lleve asociado
la recuperación de caminos, vías pecuarias y riberas y su reforestación.
Instamos también al Ayuntamiento a que ejerza su papel en relación a la
protección de la “Dehesa Nueva”, última dehesa de nuestro pueblo, así como a la
restauración de canteras con especies autóctonas y la regulación del pastoreo,
otro de los graves problemas a los que se enfrenta la vegetación de la
periferia urbana.
Andaluces de Alcalá, 24
de abril de 2015
[1] Decreto 382/2011, de 30 de diciembre,
por el que se declaran en Andalucía varios espacios Monumento Natural.
[2] Actuación que vino a reparar, parcialmente,
la desgraciada “opción de compra”, que sobre la totalidad de la finca, muchos
creíamos tenía el Ayuntamiento en los años previos a la Expo92.